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El maestro Josep Pons, que ha renovado como director musical del Liceu hasta la temporada 2012/22, conduce la ópera que revolucionó las normas armónicas y la música tonal y que representa el homenaje que Wagner quiso hacer al amor
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Iréne Theorin y Stefan Vinke, indiscutibles triunfadores en el Liceu como Brünnhilde y Siegfried, respectivamente, en ‘Der Ring des Nibelungen’, vuelven a Barcelona
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Una gigante semiesfera de 5,2 toneladas marca la impactante escenografía ideada por Alfons Flores, que completa el equipo artístico de La Fura dels Baus junto a Franc Aleu (video proyecciones) y Josep Abril (vestuario)
Barcelona, 23 de noviembre de 2017. El Gran Teatre del Liceu acoge, del 28 de noviembre al 15 de diciembre, la impactante producción de Tristan und Isolde de Wagner dirigida por Àlex Ollé de La Fura dels Baus y bajo la batuta del maestro Josep Pons. Iréne Theorin y Stefan Vinke encabezan un reparto wagneriano de primer nivel con Albert Dohmen, Greer Grimsley y Sarah Connolly, que llenarán la espectacular puesta en escena que han ideado los también integrantes de La Fura Alfons Flores (escenografía), Franc Aleu (videocreación) y Josep Abril (vestuario), junto a la iluminación de Urs Schönebaum. La Orquesta y el Coro del Liceu completarán un equipo artístico al servicio de una de las más grandes historias de amor y muerte jamás contadas.
Una espectacular puesta en escena
Una gigante semiesfera de 5.200 kg corona el escenario y se convierte en el centro del universo simbólico de este montaje. Una estructura que hará de gran luna en el primer acto y que basculará y descenderá progresivamente para convertirse en el castillo del Rey Marke en el segundo acto. En el tercero y último, acabará transformándose en la gran losa que carga el personaje de Tristan. Esta gran semiesfera se acompaña también de una plataforma en movimiento y de video proyecciones que potencia la vertiente simbólica del montaje y los sentimientos internos de sus personajes. Una puesta en escena excelente del equipo artístico de La Fura dels Baus que refuerza el ideal wagneriano de querer construir “la obra de arte total” y que se encuentra en el “ADN de la Fura dels Baus como compañía multidisciplinar”, asegura Ollé.
Tristan und Isolde es la culminación del ideario artístico de Wagner. La obra es, a su vez, la traducción musical de la filosofía nihilista de Arthur Schopenhauer y un homenaje al amor del propio Wagner, que aseguraba: “como en esta vida nunca he sentido la verdadera dicha del amor, debò erigir un monumento al más bello d etodos mis sueños, en el cual, de principio a fin, ese amor debe saciarse de fondo”.
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Tristan und Isolde supone un nuevo reto para el director musical Josep Pons y para la Orquesta Sinfónica del Gran Teatre del Liceu, que se enfrentan a “la ópera más camerística del compositor alemán”. Una ópera que abrió camino para las composiciones del siglo XX revolucionando, con su ambigüedad armónica, la música tonal. El maestro se refiere concretamente al conocido como acorde Tristan para hablar de “la semilla que destruiría en un futuro la tonalidad”. Un acorde inestable con el cual juega el compositor alemán para reforzar la expresión dramática de la obra, para explicar el sentimiento de los dos personajes principales y su aproximación al amor. “Wagner no quería sorprender musicalmente, sino dramáticamente”, asegura el maestro Pons.
Tristan und Isolde es un drama musical en tres actos, libreto y música de Richard Wagner. Una historia de amor, traición, venganza y muerte que nos acerca al enamoramiento místico y espiritual al que se entregan Tristan e Isolde y que supone un viaje al interior de las emociones. Esta ópera se representó por primera vez el 10 de junio de 1865 en el Hoftheater de Múnich. Al Liceu llegó el 8 de noviembre de 1899, donde se ha representado un total de 171 veces, siendo la última ocasión el 18 de marzo de 2015.
Actividades en torno a la ópera
Doce artistas, conocedores de la importancia de este drama musical, han querido expresar en imágenes el sentimiento que les invade cuando se sumergen en el texto y la música de Tristán e Isolda. Lo harán en una exposición en el Balcón Foyer titulada Proyecto Tristán y comisariada por el coleccionista privado Manel Bertran Mariné, que se podrá ver hasta el próximo 16 de diciembre. Temas como el amor, la atracción, el deseo, la agonía o la venganza están presentes en las obras de Robert Llimós, Montse Clausells, Manolo Sierra, Marcos Palazzi, Opus Nigrum, Fran Recacha, Fabio Hurtado, Jordi Gispert, Ramon Lombarte, Henry Flórez, Kike Meana y Xevi Solà.
Además de la exposición, el Liceu propone una serie de actividades en torno de este título, como la conferencia Atrévete con Wagner. El acorde Tristán, cuatro notas que cambiaron el mundo, que a cargo del doctor en Humanidades, músico e historiador Carlos Calderón nos descubre las claves para entender la ópera con la que Wagner transgredió las normas clásicas de la música.