Playlist

Playlist 'Orgia'

En su tercera colaboración en una ópera, el compositor Hèctor Parra y el director de escena Calixto Bieito abordan una brutal obra de teatro de Pasolini, escrita en 1966.

Prólogo, Hombre

«Sono morto da poco, il mio corpo penzola a una corda…»

La estructura de la ópera es circular: comienza con el final, con el suicidio del Hombre, que ha llegado a la conclusión de que es diferente –homosexual– en una sociedad que penaliza brutalmente la diferencia. Ha decidido, por tanto, ahorcarse en su propia casa. En este prólogo, el personaje cuelga del techo y se dispone a explicar su historia con un lenguaje musical que indica el tono del resto de la obra: una orquesta violenta, disonante y repleta de matices tímbricos, y una manera de cantar que oscila entre el chispazo lírico y la entonación dialogada, en la tradición de la ópera de vanguardia del siglo XX.

 

Escena IV, Mujer

«Sai cosa vuol dire vivere un sogno?»

Esta escena es la más lírica de la ópera, y puede considerarse como el aria principal de la Mujer protagonista, una larga pieza en solitario en la que expresa de manera libre su dolor y sus frustraciones, que tienen que ver con el fracaso de su matrimonio y su añoranza del pasado, un tiempo más libre, pretecnológico y humano. Su conclusión es que la sociedad asfixia cualquier deseo de felicidad, y decide suicidarse matando antes a sus dos hijos, como Medea. En esta sección, Hèctor Parra incorpora citas musicales a piezas de Bach (la última Suite Francesa) y al Orfeo de Claudio Monteverdi.

 

Escena V, Hombre, Chica

«Questa è casa tua?»

Tras el suicidio de su esposa y el asesinato de sus hijos (que no aparece en escena), el hombre atrae a una joven prostituta a su casa. Vuelve a sentirse solo, incomunicado, pero la única forma de comunicación que comprende es la de la violencia, e intenta que la chica se someta a su ritual sadomasoquista. En una escena cargada de tensión, ella se quitará la ropa hasta descubrir las verdaderas intenciones del Hombre, y entonces huye. El Hombre, derrotado finalmente, asqueado de su situación, decidirá vestirse con las ropas de la chica y ahorcarse en su propio salón.